sábado, 2 de junio de 2012

Memorias de aquel fuego "souvenirs un goût café"



 En el café había un gato, era tu preferido y se sentaba en tu falda. Después de mucho negociar pusiste tu obra en la mesa y nos agasajaste con una pila de panqueques con chocolate y una manzana encima, que en los viajes llamamos “ApleHäuptaunlsalat” y los alemanes, que no son tan delicados con la comida seguramente usaban para eliminar plagas.
Para nuestra sorpresa el gato devoró la mitad del banquete, sin olfatear mucho rato, solamente un par de veces. Por lo visto, ya estaba acostumbrado a tus experimentos gastronómicos. Me sorprendió bastante a decir verdad y  te felicité por tu éxito con el gato.


Estábamos sentados con Max, quien me había presentado a Pía. Cuando ya habíamos comido, me preguntaste: “¿Ya visitaste nuestra Fragata?, una de las primeras que se construyeron acá”. Yo no conocía la Fragata (jamás había visto una a decir verdad) y Max decidió en el acto que teníamos que verla sin demora. Llamamos a un taxi y Pía, aunque conocía muy bien la Fragata, también vino con nosotros.


Nos quedamos anonadados por aquel barco enorme, majestuoso...
Entonces Pía nos invito a pasar y nos guiaba como si aquello fuera de su propiedad. Nos presentó a los propietarios, una mujer con aire frágil, pelo color caoba y un Aborigen de aspecto colosal.
Después, nos llevó de habitación en habitación, me explicó la construcción y concluyó: "En el interior de una buena casa, todo queda bien. Todo está en su lugar... 

En el silencio... (Ironías de algún momento)





En el silencio hay belleza. Las palabras no dichas, la anticipación de que deben venir, la alegría y la espera...
Suspirar las pausas y aspirar la vida, la música... 
La calma en cada aliento del habla, tiñe de susurros el potencial discurso. 


En el silencio hay vida, soledad, consuelo... Una ruptura al ruido y el caos que parece tan constante. Aunque suene irónico, la música se parece al silencio. Esto coloca al orden en la misma dirección que el caos del sonido. 


Eso es lo mejor de ambos mundos, vamos abrazando tanto al ruido como a la calma para crear algo...


Para que todo tenga sentido...